EL MURO DE LA VERGÜENZA

Sus paredes fueron construidas por el ejército marroquí en los territorios saharauis ocupados militarmente por éste desde el año 1975, tienen como objetivo básico ideas expansionistas, así como la posesión por la fuerza de tierras que siempre les han sido ajenas, además de materializar el hecho consumado. La ocupación por la fuerza.

Este muro hoy en día representa una verdadera violación a los derechos más elementales de las personas así como una clara ofensa a la legalidad internacional.

EL ORIGEN DEL MURO

Con la salida de España del territorio en el 1795 comenzó a librarse una guerra que enfrentó al Frente Polisario con sus vecinos del norte y el sur: Marruecos -que invadía el territorio por el norte,- y Mauritania -que hacía lo propio desde el sur- En 1979, Mauritania, al borde de la quiebra, firma la paz con el Frente Polisario y renuncia a sus pretensiones sobre el territorio, acto indebidamente aprovechado por Marruecos para expandir su ocupación a todos los territorios saharauis. Dicho acto fue denunciado a tiempo por el Polisario así como por las instancias internacionales.

El Polisario intensifica sus ataques en defensa propia, el reino alauita estaba a punto del caos, de esta forma, el ejército marroquí después de haberse frustrado en todas sus tácticas encaminadas a ocupar el Sahara Occidental se ve obligado a buscar a una "mágica solución" desde su propio punto de vista.

Hassan II en una apreciación de la situación político-militar del conflicto incurre de nuevo a otra supuesta solución como última alternativa, ésta fue la creación de los criminales “muros de la vergüenza”.

LOS PREPARATIVOS Y EL COMIENZO DE SU CONSTRUCCIÓN.

Una fuerza especial bautizada Larak y organizada por el coronel Ben othman, que había bajado del Marruecos central, tomó posición en Abattih al sur de Tantan y en agosto de 1980 se dirigió hacia Ras el Janfra, una colina que domina la vasta planicie entre los montes de Zini y Smara con una misión asombrosa: proteger a los constructores de un gigantesco muro en forma de anillo que defendería el Sahara de las derrotas pasadas...Despejado el terreno y con decenas de miles de soldados defendiéndolo, cientos de excavadoras, bulldozers, brigadas de zapadores e ingenieros se pusieron a levantar una barrera que meses antes parecía una ficción descabellada pero que indudablemente se hizo realidad y que en nuestros días permanece causando penas incontables así como desolación y desesperanza.Tras construcciones escalonadas en seis tramos, la gran muralla cerró definitivamente el anillo en abril de 1987, con su llegada al océano Atlántico por la Güera. La faraónica obra cercaba así al Sahara Occidental.Algunos observadores recalcan que no había precedentes de una obra similar, mientras ingenieros, zapadores y gigantescas excavadoras trabajaban día y noche, al mismo tiempo, cuarenta mil soldados protegían la obra. Más que por su complejidad técnica, la construcción era un reto por sus dimensiones.